Es un momento para despertar la tolerancia y la paciencia hacia nosotros mismos y los otros.
Jesús no vino a crear religiones que nos separen, sino a mostrarnos el camino del Amor, el Amor en principio hacia nosotros mismos y luego hacia los otros. Tenemos que estar llenos nosotros para luego poder dar hacia el afuera. No podemos dar aquello que no tenemos para nosotros mismos.
Muchas veces estamos llenos de confusión, de falsas creencias que repetimos sin cuestionar porque no los dicen otros. Y siento que la Verdad nace de un corazòn puro que está dispuesto a cuestionarse todo y tener el coraje y el valor de salir de la consciencia de masas y probar asi la verdad INTERNAMENTE. Esta es consciencia en evolución, no repetición de estructuras o rituales vacios de fe y sentido.
Despertemos el Cristo Interior, el maestro interior, como hace 2000 años nos vino a enseñar el
Amado Cristo Jesús.
Con amor a todos
Fabiana.
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