“No somos el cuerpo, no somos las emociones, no somos lo que pensamos: SOMOS EL ESPÍRITU DEL AMOR, por el momento en el planeta Tierra, aprendiendo a expresar nuestra verdad, nuestro conocimiento divino, que es nuestra luz”.
Hay tres caminos de desarrollo espiritual que cada uno de nosotros puede elegir para experimentar. El primero y más popular es el camino del sufrimiento, en el cual las personas sufren su propia negatividad y falta de comprensión, debido a una escasa educación y a falsas enseñanzas. De algún modo, ha proliferado la idea de que para iluminarse y ser libres es necesario sufrir.
Por supuesto que este es un concepto totalmente errado. Cada uno de nosotros está ya iluminado con el poder creativo, y si enfocamos esta energía de luz dentro de nosotros, seremos guiados por una consciencia espontánea que sabe exactamente qué es lo correcto para nosotros.
Cuando nos enojamos con a aquello que nos sucede, o somos hostiles con los demás, o sentimos pena de nosotros mismos, entonces tratamos de escapar de la realidad y nos separamos de la vida y la comprensión. De esta manera la vida se vuelve miserable.
Un camino mucho más rápido de evolución espiritual es el camino del servicio.
En él nos servimos a nosotros mismos y a los demás a través de la calidad de nuestro trabajo, y nos regocijamos cuando nos damos cuenta de que podemos crear y ayudar a la construcción de un mundo mejor para todos.
El tercer camino es el más rápido de todos para la evolución espiritual, ES EL CAMINO EN EL CUAL CAMBIAMOS NUESTRA CONSCIENCIA.
Es el camino alquímico en el que podemos mirarnos a nosotros mismos y a nuestras actitudes y decidimos cambiarlas cuando observamos una vibración que no nos sirve a nosotros ni a los demás.
Es el camino en el cual es posible visar nuestras creencias y opiniones y tomar la decisión de abandonarlas cuando ya no concuerda más con las leyes universales del amor y el perdón.
LA CONSCIENCIA QUE HAY QUE BUSCAR ES LA ACEPTACIÓN DE LOS QUE ESTÁ SUCEDIENDO, TRATAR DE VER QUÉ ES LO QUE SE NECESITA HACER Y QUÉ PODEMOS APRENDER, Y LUEGO HACER LO QUE SENTIMOS QUE ES CORRECTO.
LA VIDA ES AHORA. DANCEMOS CON SU IMPULSO. ES TIEMPO DE CAMBIOS, EJECUCIÓN Y AVENTURA Y SE SUPONE QUE DEBERÍA SER DIVERTIDO.
Pero cuando usamos nuestra mente racional para pensar en el pasado o en el futuro, estos pensamientos nos restringen y hacen que nos perdamos justamente lo que está ocurriendo ahora. Así que dejemos el pasado y preparémonos para la transformación.
Nosotros necesitamos cierta reparación para poder estar más abiertos a la transformación. Esto implica tomar la decisión de observarnos y simplemente estar conscientes de lo que estamos haciendo. Una vez que enfocamos la atención en el momento presente, podemos comenzar a recurrir a nuestras facultades intuitivas para obtener dirección.
Estas fuentes de intuición son nuestro enlace directo con nuestro ser interior, confiemos en ellas. Porque no os van a fallar. Ellas nos informan instantáneamente acerca de todo lo que necesitamos conocer en cualquier situación.
Nuestra responsabilidad consiste en ser nosotros mismos y expresar la esencia del espíritu que está dentro de nosotros. Para ello es necesario que la consciencia y la subconsciencia se unan y trabajen juntas. Esto pondrá en marcha nuestra fuerza creativa y todos los problemas serán resueltos espontáneamente desde el corazón.
LA MEDITACIÓN ES UNA TÉCNICA QUE NOS AYUDA MUCHÍSIMO A CONTACTAR CON ESE MOMENTO DE UNIDAD CON TODA LA VIDA Y CON EL ORIGEN. Y CUANDO ESTEMOS PREPARADOS PARA HACERLO, NUESTRO SER IN TUITIVO, QUE ES NUESTRO SUBCONSCIENTE, NOS COMIENZA A APOYAR ESPONTÁNEAMENTE EN LA IMAGINACIÓN.
ESTO ES MEDITACIÓN, DESPERTAR A NUESTRA CONSCIENCIA CREATIVA Y EXPRESAR LO NUEVO, O SEA EL AMOR. Y A MEDIDA QUE LO HACEMOS, TAMBIÉN VAMOS A COMPARTIR LA PAZ INTERIOR Y LA SATISFACCIÓN QUE OCURRE CUANDO NOS CONTACTAMOS CON NUESTRA CONCIENCIA SUPERIOR.
ROBERT HAPPÉ, de su libro “LA RESPUESTA ESTÁ EN LA CONSCIENCIA”.
CON AMOR, FABIANA
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